El Juego Vasco de Pelota
29 de Junio del 2009 - 10 de Enero del 2010
En los s.XV-XVI es común la práctica del juego de pelota en Italia, Francia, Flandes, Alemania o España y lo es también al otro lado del Atlántico, desde donde las crónicas informan de la existencia de juegos de pelota con rasgos diferenciados según culturas pero con similitudes entre ellas en cuanto que la dominante es el componente religioso.
Estos juegos de pelota irán definiéndose progresivamente en dos tipos de juegos que serán el juego a corto y el juego a largo, que se jugarán a cubierto o al aire libre y que utilizarán o no herramienta: el jeu de paume en Francia, el pallone a bracciale en Italia, el juego a largo en la Península. Se juega de uno contra uno o en dos equipos enfrentados y los jueces controlan el juego y las apuestas.
El juego de pelota en España parece mantenerse hasta el siglo XVIII, momento en el que comienza a decaer motivado en parte por las prohibiciones y limitaciones que las autoridades establecían, consecuencia las más de las veces, de las alteraciones de orden público que estos espectáculos originaban. En Euskal Herria el juego de pelota no sólo no desaparece sino que se transforma hasta convertirse en una expresión cultural bien definida que tiene en el frontón de pared izquierda y en el juego a blé, su máxima expresión. El juego de pelota es, para nuestras gentes, un divertimento, un entretenimiento y un modo de relacionarse con los pueblos y territorios vecinos. El pueblo o la villa participan del espectáculo y los organismos municipales se encargarán de tener estos espacios en buenas condiciones y de permitir su uso público. El juego de pelota se localiza de este modo en las calles y plazas públicas, en lugares cercanos al Ayuntamiento o a la iglesia, en definitiva en zonas de uso comunitario que sirven de punto de encuentro especialmente en días festivos.
La existencia del frontón es sin duda alguna fruto de la capacidad de innovación de nuestras gentes y es la principal aportación de nuestra cultura a un juego tan universal como es la pelota. El juego en frontón y el juego a pelota mano en particular son, junto con el laxoa, la chistera o la cesta por nombrar las herramientas de juego más conocidas, producto de una sociedad en continuo proceso creativo y al mismo tiempo respetuosa con el saber adquirido.